Páginas

15 de marzo de 2015

Me gustan las personas

Núria Fernández, headhunter
Por Eva Espinet, periodista

Tengo 47 años, soy psicóloga y me gustan las personas. Nací en Barcelona. Mi especialidad es la comunicación no verbal y la imagen personal. Estoy felizmente casada con David y tengo dos hijos adolescentes, Marc y Núria, con cuyos nombres bauticé mi empresa Cramairun. Si no hubiera trabajado en recursos humanos, me hubiera gustado ser comercial. Aunque soy católica, me identifico con el Budismo. Lo que me gusta de mi profesión es poder ayudar a otras personas.

Se define “vital, optimista, a veces un poco soñadora y sensible”. A Núria le gusta que la reten y se ha sentido como pez en el agua trabajando para multinacionales en plena expansión como Catalana Occidente,  Telepizza o Pans & Company. Cansada de no poder conciliar su vida familiar y laboral,  decidió crear su propia empresa de asesoramiento  en  recursos  humanos,  selección  y búsqueda de directivos,  una especialidad clave para el momento que vivimos.

Sensible y cazatalentos, una rara avis…
No, para nada. Precisamente lo que me gusta de mi profesión es poder ayudar a otras personas. Aunque no soy una ETT, si puedo mover el currículo de una persona porque lo necesita, no paro hasta conseguirle un trabajo y eso me satisface muchísimo.
Suena bien, sobre todo cuando una se imagina la profesión de un headhunter como la de un agresivo y frío ejecutivo.
Los hay... tiran de base de datos y al que van a contratar lo ven sólo como un número... Pero eso a la larga ni es rentable, ni es honesto. Hay que trabajar el proceso de selección hasta el final, colocando anuncios y activando currículos que se adapten al perfil que me han encargado hasta dar con la persona idónea.
Vamos, que hay que tener mucho de psicóloga.
No hace falta ser psicóloga para esta profesión, pero te tiene que gustar mucho el trato con las personas.
¿Qué  consejo  profesional  le  das  a  aquella  persona  que  está  en el  paro y no encuentra trabajo?
Es muy fácil  decirlo y muy difícil  seguir el  consejo que yo les pueda dar,  pero les animaría a continuar luchando, a no desesperarse. De lo contrario, se entra en un ciclo negativo que impide tirar adelante. A veces es importante engañarse un poquito para seguir con ilusión, esa ilusión se contagia y ayuda finalmente a salir del bache. Se debe ser optimista, siempre.
¿Cómo buscamos las ofertas de trabajo?
Internet está lleno de ofertas. Acudir a páginas como Infojobs, Monster, Trabajos.com, Laboris o directamente a las webs de las empresas. Lo que hay que hacer es insistir.
¿Y si no?
Plantéate montar algo por tu cuenta o renovar tu profesión. Al final hay que buscar algo que nos haga felices.
¿El networking sirve para encontrar trabajo?
Totalmente.  Siempre  ha  sido  importante,  pero  ahora  más  que  nunca.  Si  quieres encontrar trabajo, cuantos más contactos tengas, mejor. En el caso de redes como EO-L lo encuentro muy enriquecedor; es más que un  networking laboral,  es una red que te acompaña en todos los sentidos.
¿Y una cazadora de talentos tiene tiempo libre?
¡Claro! Yo vivo en una casa con jardín y tengo un huerto. Me encanta la jardinería y cultivo mis tomates de Cor de Bou y de Pera. Dedico todo mi tiempo a mi familia y ahora veo crecer a mis hijos, de los que me siento muy orgullosa. Y siempre que puedo me gusta ayudar a los demás, aunque sea con pequeños gestos.
¿En qué crees?
Aunque soy católica, me identifico mucho con el budismo. Comparto sus ideas, me da paz. Su filosofía enseña a conocerte a ti mismo y eso es esencial para avanzar en la vida.